lunes, 30 de abril de 2007

ΑΠΟΛΟΓΙΑ ΣΩΚΡΑΤΟΥΣ 30 La mala educación


“Pero”, dijo Hermógenes que dijo Sócrates, “de la misma manera que Homero otorgó a algunos de los que perdieron la vida la capacidad de conocer de antemano el porvenir, de igual modo quiero yo hacer una profecía”.

En Ilíada XVI , una vez que Héctor hiere de muerte con su lanza a Patroclo y le dirige unas despreciables palabras, éste con voz lánguida le replica diciendo: ( vv. 853-855) “Otra cosa voy a decirte , que fijarás en la memoria . Tampoco tú has de vivir largo tiempo, pues la muerte y el hado cruel se te acercan, y sucumbirás a manos del eximio Aquiles, descendiente de Eaco”.

Y en Ilíada XXII vv. 356 y sigs., Héctor encontrándose a punto de perecer pide a Aquiles ,que le ha atravesado su espada, que entregue su cadáver a sus padres y a los troyanos, pero ante la negativa y desprecio del Pélida, le dice : “Bien te conozco, y no era posible que te persuadiese, porque tienes en el pecho un corazón de hierro. Guárdate de que atraiga sobre ti la cólera de los dioses , el día en que Paris y Febo Apolo te harán perecer, no obstante tu valor, en las puertas Esceas”.

En ambos casos , un héroe a punto de morir en el campo de batalla , reserva su último aliento para dirigirse al guerrero que le ha causado la muerte, vaticinándole su destino, la muerte, próxima y a manos de su enemigo, como última venganza.

Igualmente, Sócrates en los últimos momentos del juicio, cuando ya está sentenciado a muerte, quiere, como los héroes épicos, despedirse de sus enemigos vaticinándoles los peores males. Y encontrándose no en un campo de batalla sino en un tribunal, acusado de corromper a los jóvenes y de ser una mala influencia en su educación, a Anito le dice precisamente que a su hijo le espera un futuro terrible pues, debido a no tener un buen mentor o educador, caerá en la senda del vicio y de la depravación.

La educación aparece como tema de no pocos discursos platónicos: Laques, Eutidemo, Protágoras , Teages, Las Leyes….

El momento histórico en que vive Sócrates responde a una sociedad en que la educación se vive como una cuestión polémica en cuanto que hay diversos enfoques de cómo abordarla: o bien se interpreta como un instrumento práctico para la consecución del éxito político , del poder y la fama (el caso de los sofistas), o bien sirve para la reflexión, para el autoanálisis y la reconducción de la conducta humana ( aquí está la ética socrática), o bien sirve para racionalizar los sentimientos y creencias religiosas ( sería el caso de algunos filósofos como Demócrito), o finalmente se la veía por parte de sectores muy conservadores como una nueva moda que amenazaba el espíritu y la mentalidad tradicionales en los que se basaba la polis , la familia y la religión.

En Protágoras el sofista con dicho nombre expone en la reunión en casa de Calias el método de enseñanza tradicional del que las familias de bien hacen uso para educar a sus hijos en la virtud , y en Laques nos encontramos con Lisímaco y Melesias, dos honorables ciudadanos atenienses de buenas familias, preocupados por la educación de sus hijos, que solicitan a Laques y Nicias, dos estrategos de renombre, que les aconsejen sobre la conveniencia o no de educar a sus hijos en el arte del combate con todas las armas del hoplita, en vistas a una completa formación para el éxito en la política.(probablemente siguiendo un planteamiento de la educación tradicionalista).

Son dos ejemplos que nos sirven para tomar el pulso de la actualidad del tema de la educación en el siglo V, y explicarían por qué Sócrates se arriesga a vaticinar un nefasto futuro para el hijo de Anito, dando a entender que éste no se ha preocupado suficientemente por la educación de su hijo, y por tanto ineludiblemente va a acabar mal.

(Las citas de la Ilíada corresponden a la traducción del Dr. Luís Segalá).

martes, 24 de abril de 2007

Arquitectura Moderna (Un paseo por Londres)

Es curiosa la sensación que he experimentado al visitar Londres no por primera vez y constatar que la emoción era igualmente inmensa , la sorpresa tremenda y el descubrimiento de cosas nuevas impagable. Si juntamos a ello que con la edad vamos cambiando y vemos lo conocido con una mirada diferente ,y que la compañía era maravillosa (además de la ayuda de los avances técnicos de cámaras digitales , el buen tiempo, y todo eso), resulta que el viaje ha sido una inolvidable experiencia (aunque breve) que archivaré en mi memoria para siempre.

El pretexto del viaje era el British Museum, (¡hasta reventar!); pero dio para mucho más.

Aquí voy a detenerme en un aspecto concreto en el que insistí a lo largo de los tres días (sin ser en absoluto entendida; simple impresión): el contraste entre las iglesias y edificios neoclásicos que abundaban en la ciudad -aparte de los de estilo victoriano, por supuesto- y las ultramodernas torres de oficinas que invaden el cielo con su altura de vértigo, y que a mi me atrajeron especialmente.

Todos tenemos más o menos referencias de los siguientes edificios emblemáticos londinenses: The British Museum, consagrado básicamente a las antigüedades, donde los amantes de la cultura clásica y del Partenón en particular tienen mucho que ver; The National Gallery y la Tate Gallery, que reunen una de las más importantes colecciones de pintura del mundo; The London Tower, fortaleza defensiva del siglo XI construida para proteger la ciudad; The Westminster Abbey, símbolo de la monarquía británica donde son coronados y enterrados los reyes; The Houses of Parliament y el Big Ben, corazón de la actividad política; St. Paul’s Cathedral, obra maestra de Wren; The Buckingham Palace, residencia de la reina; los grandes y maravillosos parques llenos de gente , los mercados, las riveras del Thames, que permiten un paseo a lo largo del río de unos cuantos kilómetros etc...

Al mismo tiempo, y conviviendo con ellos, codo con codo, como si de una superposición de imágenes se tratase, existen otros, menos conocidos para nosotros los extranjeros, pero igual o más espectaculares, si cabe, por sus inusuales formas , sus llamativos diseños y sus nuevos materiales de construcción, acordes con nuestra era ,y que crean una nueva línea en el horizonte de la ciudad. Mencionaré sólo los que he visto en este viaje, los demás para otra ocasión.



The London Eye , del año 2000, frente The Parliament Houses, en la otra margen del río, parecido a una enorme noria pero de movimiento casi imperceptible , es una enorme rueda desde cuya máxima altura se tiene una de las más espectaculares vistas de la ciudad.








The National Westminster Bank, o Tower 42, de 180 metros de altura , el edificio más alto de la City de Londres, en cuyo ático, he leído, te puedes tomar una copa en un exclusivo pub llamado “Vertigo”, en alusión a sus precios más que a su altura.







The Lloyd’s of London, que aloja un mercado de seguros británico ,edificio singular que recuerda por un momento el Centro Pompidou de Paris, con sus tubos y conductos por fuera del edificio.




30 St. Mary Axe, diseñado en el año 2000 por Norman Foster para la Swiss Re Insurance Company, llamado también por los londinenses “The Guerkin”, “el pepinillo”, que en 2004 recibió el premio de mayor prestigio en arquitectura en Gran Bretaña.


Como la mayoría de los más famosos edificios de Londres, estos tres últimos solo podemos contemplarlos desde fuera: en la distancia, o desde su propia puerta principal; lo curioso es que cuando estás relativamente cerca, por un momento desaparecen y no los ves, camuflados entre otros edificios de altura inferior, debido a su ubicación en calles estrechas de la City (la ciudad financiera de Londres).

Una excepción: hay un fin de semana en Septiembre, “The London Open House Weekend”, en el que se pueden visitar por dentro los 500 edificios más singulares de Lon

dres, y gratis!


Otro contraste golpea nuestra visión si comparamos la fachada neoclásica del edificio que aloja el British Museum, de 1854, y el de la Tate Modern Art Gallery, antigua central eléctrica que en el 2000 fue reconvertida en una de las importantes galerías de arte del mundo.

En su fachada exterior destaca su enorme chimenea de ladrillos.


Y no menos llamativo resulta el último puente construido sobre el río Thames , peatonal, The Milennium Bridge, de Norman Foster ,inaugurado también en el 2000, que une dos iconos de la ciudad , St. Paul’s Cathedral y la Tate Modern Art Gallery. Comparado con los otros, tan robustos y hercúleos, de piedra y ladrillo, el de Foster , construido en aluminio y acero inoxidable, resulta ingrávido, ágil, estilizado, simplemente vivo.


En fin, Londres, una ciudad cosmopolita , multicultural , de enormes contrastes en todos los aspectos , y cuando la dejas, tienes la sensación que has estado en todo el mundo y que has hecho un viaje a través del tiempo repasando toda la historia del arte.

Aqui podéis ver más fotos sobre la arquitectura de Londres.

Dedico este post a mis queridas amigas y compañeras de viajes Elena, Mª José y Júlia.

martes, 17 de abril de 2007

El Acueducto de Segovia y el siglo XXI

Definitivamente, el Acueducto de Segovia es uno de los monumentos más espectaculares y mejor conservados de época romana que podemos contemplar en nuestro país .Hago esta afirmación porque lo he visitado en estas vacaciones, y me impresionó mucho, a pesar de que lo había visto infinidad de veces en fotos y me resultaba próximo y familiar sin haberlo contemplado in situ.

Los alumnos, desde luego, lo conocen y tienen noticias de él gracias a las clases de Historia .

Ya en Cultura Clásica, si les preguntas cuál era su finalidad, más o menos saben que era para transportar agua, pero si les preguntas cómo, no les resulta tan claro.

La propia palabra romana “aquaeductus” nos dice lo que significa un acueducto: un conducto de agua. Un acueducto era un canal hecho por los romanos para transportar agua de un lugar a otro, y normalmente con una leve pendiente, para que el agua fluyera cuesta abajo sin aplicar ningún tipo de presión.



El agua fluía por el canal , llamado por los romanos “specus”, cuyas paredes, suelo y techo era de piedra; y este canal podía ser construido bajo tierra , a ras de suelo, o elevado sobre una muralla o hilera de arcos en caso de que tuviera que atravesar un valle o depresión del terreno; también los había excavados en roca sólida.

Desde luego, cuando hablamos de los acueductos romanos sólo nos viene a la mente el tipo más espectacular, claro, que es el canal sostenido por una hilera de arcos superpuestos de gran tamaño. Máximo ejemplo de él es el de Segovia.

El Acueducto de Segovia fue construido a finales del siglo I d C. para abastecer de agua a la población de Segovia. El agua era traída desde la sierra de Guadarrama mediante un canal cuyo recorrido hasta la ciudad es de 14.965 metros.

Si iniciamos nuestro paseo desde la confluencia de la calle del Coronel Reixac con la Avda. del Padre Claret, nos encontramos primeramente con un muro con el specus en la parte superior que se dirige hasta la llamada Casa del Agua, desarenador del acueducto que contiene un sistema de decantación del agua. La casa es de la misma época que el acueducto, pero fue reconstruida en el siglo XVIII.

El tramo de arcos (166 en total) ocupa 958 metros y está levantado mediante grandes sillares de granito sin argamasa de unión.

Avanzamos desde una hilera de arcos pequeños separados del suelo por una pequeña basa , que van creciendo de tamaño al igual que las basas, que se convierten a su vez en pilares, hasta llegar a la Plaza de Díaz Sanz donde la hilera de arcos, ya de tamaño importante, empieza a ser sostenida por otra hilera inferior, y el trayecto experimenta un brusco giro hacia la plaza del Azoguejo.



En este punto el monumento alcanza su máxima altura: 28,10 metros. Aquí la imagen es de dos hileras superpuestas de arcos iguales sostenidas por pilares: los pilares de la hilera superior son de menor altura y grosor que los de la inferior, formados éstos por cuatro secciones que se estrechan según crecen en altura.

La progresiva estrechez de los pilares se consigue utilizando sillares de menor volumen en las partes superiores, aún manteniendo el mismo número de piezas.


El acueducto llega hasta la muralla y a partir de ella atraviesa el recinto amurallado bajo el pavimento hasta llegar al Alcázar, en el extremo opuesto, levantado sobre los restos de una fortaleza romana.

Bueno, que me ha gustado mucho.

Leo que fue declarado Monumento Nacional en 1884 y Patrimonio de la Humanidad en 1985.

Pero aquí tenéis otras vistas de interés del monumento.


Sin palabras.

domingo, 1 de abril de 2007

Dioses y fiestas atenienses: Las Panateneas y las Grandes dionisias II


Hacia la misma época en que se construía el Partenón, Pericles ordenó la construcción de otros cuatro templos. En Atenas se construyó el templo de Ares, dios de la guerra, y el templo de Hefesto, dios del fuego, del taller y de la fragua del herrero, el Hefestión, aún bien conservado que , aunque no sobresaliese particularmente comparado con otros templos, su colocación sobre el ágora, lo situaba en el centro de la vida ateniense.

En el culto de los artesanos Hefesto está asociado frecuentemente con Atenea, pero su esposa es Afrodita, quien no hace mucho caso de este vínculo matrimonial y prefiere la fuerza primordial y guerrera de Ares. (Imagen:El templo de Hefesto en el Agora)


Los otros dos templos se hallan fuera de Atenas: en el promontorio de Sunio se elevaba el templo del dios del mar, Poseidón, visible a todos los barcos que volvían a Atenas por el este, siendo lo primero que se veía de la patria; y en la costa norte del Ática, en un acantilado se elevó un templo a Némesis, quien como personificación del destino no podía ser dejada de lado por un pueblo como el ateniense.

Dioniso era el dios del vino, y estaba ligado a la experiencia de la embriaguez, del delirio, de la locura y de la fiesta orgiástica. Su culto, que prefiere la montaña y el bosque y atrae hacia él a mujeres y bárbaros, es con frecuencia visto como subversor del orden constituido por la polis. En su santuario en Delfos era venerado junto a Apolo, y en la religión de la ciudad se integró reservándole su papel específico en la fiesta, en los momentos carnavalescos donde domina el vino, y sobre todo en los festivales teatrales.


En su honor se celebraban en Atenas importantes fiestas: las Dionisias Agrarias, de carácter alegre y ruidoso, con procesiones campestres y grupos de jóvenes cantando y lanzando bromas picantes y obscenas a quienes encontraban en el camino; las Leneas, en las que mujeres poseídas por el delirio báquico danzaban en el Lenaion sus danzas de éxtasis y desenfreno, y tenían lugar también representaciones líricas y dramáticas; las Antesterias fiestas que, durante dos días mediante diversas ceremonias en la ciudad y el Limneo, antiguo santuario de Dioniso próximo a Atenas, celebraban las bondades del vino, la llegada de Dioniso a la ciudad y sus efectos de prosperidad y fecundidad, y al tercer día concluían con unas ceremonias dedicadas a Hermes y a los muertos.


Pero sobre todo Dioniso está relacionado con las Grandes Dionisias, fiestas que duraban cinco días (en Elafebolion, Marzo) y que atraían a muchos extranjeros a la ciudad para asistir a las representaciones teatrales en el teatro de Dioniso al pie de la Acrópolis; también tenían lugar diversas ceremonias, procesiones y sacrificios en honor del dios.


Los festivales dramáticos estaban organizados por el estado, que encomendaba sus gastos a algún ciudadano solvente. Al final de los concursos tenía lugar la distribución de premios, según un jurado nombrado al efecto: en cada categoría, trágica y cómica, se entregaban tres premios: al poeta, al corego (el rico que ha sufragado los gastos del coro) y al protagonista.


En el mes Pianopsion(octubre) durante tres días se celebraban las Tesmoforias, en honor de Deméter , que vela tanto por la siembra en los campos como por la fecundidad de las mujeres; sólo participaban en ella las atenienses casadas; los hombres estaban excluidos totalmente. En el mes Posideon (diciembre) la fiesta de los Haloa tenía por objeto proteger el grano que estaba germinando en la tierra y se hacían sacrificios a Deméter y su hija Perséfone.


Los Grandes Misterios de Eleusis se celebraban en Boedromión(septiembre) en honor de Deméter y Perséfone,y en ellos las ceremonias rememoraban el rapto de Perséfone y su vuelta a la tierra, simbolizando el ciclo natural de la naturaleza.


Para acabar, simplemente mencionar que en los últimos decenios del sV se produjo la gran difusión del culto de Asclepio; su fama como dios médico sobrepasó los límites de la polis, y en el 420 fue introducido en Atenas, donde en la pendiente sur de la Acrópolis se le dedicó un santuario.

Dioses y fiestas atenienses: Las Panateneas y las Grandes Dionisias I


Junto a la existencia de momentos de religiosidad panhelénica, como las ligas religiosas(las anfictionías), los juegos olímpicos, la autoridad délfica…, regulados por las ciudades, en las que la aceptación de la religión olímpica, de su panteón y de sus ritos significaba además de que uno era ciudadano de su polis, que era ,por encima de todo, griego, cada ciudad poseía sus mitos fundadores, héroes epónimos, dioses locales menores, cultos particulares y ritos propios dirigidos a los dioses olímpicos ;incluso los calendarios rituales variaban mucho de un lugar a otro.

Las ciudades consolidaron su identidad por medio del culto de divinidades que estimaban protectoras especiales. Un caso ejemplar lo ofrece Atenas con su divinidad políada (propia de la ciudad) que es además homónima, Atenea.

Después de la victoria sobre los persas en Salamina y Platea, los griegos creyeron que fueron los dioses quienes realmente habían ganado al enemigo, y la religión se vinculó a la polis más que nunca antes lo había estado. Durante los cincuenta años siguientes, el período de la hegemonía ateniense, los dioses , y en particular Atenea, extendieron su mano protectora sobre Atenas, y a cambio recibieron su recompensa: en la Acrópolis se alzó la obra maestra de Ictino, el Partenón, decorado con el arte inmortal de Fidias, en cuya cella se encontraba la estatua crisoelefantina de la diosa patrona Atenea. (Detalle del Partenón)


Nacida directamente de la cabeza de Zeus sin intervención femenina, es depositaria de la inteligencia práctica que preside tanto el trabajo de los artesanos como el típicamente femenino del tejido.

Representada por lo general con armadura hoplítica, Atenea es además la Prómachos (guía y protectora armada) . Con esta doble atribución, está asociada al papel de divinidad Políade de la polis ateniense, es decir, diosa específicamente ligada al destino de la ciudad y objeto de una particular veneración por ella, por su papel garante de prosperidad y de protectora armada. También era venerada como diosa virgen, Parthénos. (Detalle del Erecteion)


Sus símbolos , y consecuentemente los de la ciudad, son la lechuza (la de ojos de lechuza según el epíteto homérico), y la rama de olivo, árbol sagrado que hizo brotar en la Acrópolis para rivalizar con el manantial sagrado de Poseidón en la disputa que los dos dioses mantuvieron , según la leyenda, por la posesión de la ciudad. El enfrentamiento se zanjó con la victoria de Atenea , y en consecuencia la ciudad tomó de ella su nombre.


Los atenienses honraban todos los años a Atenea en una fiesta llamada las Panateneas al final del mes Hecatombeón (julio) que duraba dos días, pero cada cuatro años se celebraba con una solemnidad especial y duraba al menos cuatro días: incluía competiciones atléticas que contaban sobre todo con carreras de antorchas, carreras de caballos, competiciones musicales y de recitado; se celebraba la procesión (representada en mármol en el friso del Partenón) que atravesaba el centro de Atenas para llevar a la diosa en la Acrópolis el peplo que durante nueve meses habían tejido cuidadosamente doncellas atenienses especialmente elegidas.

El punto culminante de la ceremonia era la presentación del peplo a una antigua estatua de madera de Atenea , y el sacrificio de muchos animales en honor de la diosa.

El premio de los vencedores en las competiciones atléticas eran tinajas de aceite de oliva, procedente de los olivos consagrados a Atenea, los cuales se creía habían crecido de ramas arrancadas al primer olivo plantado por la diosa en la Acrópolis.


Después del Partenón se construyó en la acrópolis el Erecteon en honor de los héroes fundadores de la ciudad, y de Atenea y Poseidón.